Es una forma de yoga que se practica en una sala con una temperatura de aproximadamente 40 grados Celsius y un alto nivel de humedad. Esta serie de yoga, también conocida como «Bikram Yoga», consta de 26 posturas y dos ejercicios de respiración que se realizan en un orden específico durante una clase que dura aproximadamente 90 minutos.
La sala se calienta deliberadamente para promover la flexibilidad y permitir que los músculos se calienten y se estiren más fácilmente. El calor también ayuda a aumentar la circulación sanguínea y a eliminar toxinas a través de la sudoración, lo que se considera beneficioso para el sistema cardiovascular y el sistema linfático.
Durante una clase, se sigue un formato constante en el que se realizan las 26 posturas y los ejercicios de respiración en un orden específico. Las posturas incluyen una combinación de ejercicios de pie y ejercicios realizados en el suelo, y se trabajan todos los grupos musculares principales del cuerpo.
Cada postura se realiza dos veces, y se mantienen durante un período de tiempo determinado, generalmente entre 20 y 60 segundos, dependiendo de la dificultad de la postura. Se anima a los practicantes a enfocarse en su respiración, mantener la concentración y escuchar a su cuerpo durante la práctica.
El Yoga con Calor se considera una práctica intensa y desafiante, ya que se combina la dificultad de las posturas con el ambiente caluroso. Se recomienda que los practicantes estén adecuadamente hidratados antes y durante la clase, y que consulten con un profesional de la salud si tienen alguna condición médica o lesión preexistente.
Como en cualquier práctica de yoga, es importante escuchar y respetar los límites de tu propio cuerpo, y trabajar gradualmente para mejorar la resistencia, la fuerza y la flexibilidad con el tiempo. El Bikram Yoga puede ser beneficioso para aquellos que buscan un desafío físico y una experiencia de yoga única en un entorno cálido y estimulante.